Enfoques y modelos de la planificación
curricular. Diseño curricular y sus fundamentos
Desde antes de finalizar el siglo
pasado se tiene la preocupación por prepararse para el siglo XXI, por adelantarse a los cambios
tecnológicos y climáticos que se vislumbraban, por llegar bien equipados a la era de la
sociedad del conocimiento, por preparar a las recientes generaciones para afrontar los
retos del inicio del milenio.
En Venezuela, en su constitución
plasma la obligatoriedad de la educación desde el maternal hasta el medio
diversificado, la gratuidad hasta el pre-grado universitario, el derecho a la calidad en la
educación, los niños y adolescentes como sujetos de pleno derecho. Es indispensable, asumir
la difícil tarea entre cuyos
principios se destaca la participación de los ciudadanos en la formulación,
ejecución y
control de la gestión pública.
Por su parte, el Sistema Educativo
Bolivariano (SEB) constituye un elemento primordial para la construcción del
modelo de la nueva República; en la medida en que está compuesto por un
conjunto orgánico de planes, políticas, programas y proyectos estructurados e
integrados entre sí, que orientado de acuerdo con las etapas del desarrollo
humano, persigue garantizar el carácter social de la educación a toda la
población venezolana desde la rectoría del Estado venezolano ejercida por
intermedio del Ministerio del Poder Popular para la Educación (MPPE), en los
siguientes sub-sistemas: Educación Inicial Bolivariana (niveles Maternal y
Preescolar); Educación Primaria Bolivariana (de 1º a 6º grado); Educación
Secundaria Bolivariana, en sus dos alternativas de estudio (Liceo Bolivariano,
de 1° a 5° año; y Escuela Técnica Robinsoniana y Zamorana, de 1° a 6° año);
Educación Especial; Educación Intercultural y Educación de Jóvenes, Adultos y
Adultas (incluye la Misión Robinson 1 y 2 y la Misión Ribas).
El currículo no es una normativa externa impuesta al centro educativo o un sistema organizado de lineamientos
construidos por expertos sin la participación de la comunidad educativa sin
tener en cuenta los hechos sociales en los contextos en los cuales las instituciones
educativas se encuentran inmersas; por el contrario debe ser un proceso de
construcción colectiva, en los que participen académicos, docentes, madres y
padres de familia, estudiantes, directivos docentes y no docentes que aporten
desde sus miradas y sentires a la formación de sujetos sociales autónomos,
participativos y comprometidos con su desarrollo humano y social.
En tal sentido, Elaborar un diseño
curricular requiere capacidad para imaginar el futuro, edificar un sueño realizable para los niños y
jóvenes de hoy y para los que vendrán. Amerita preocupación, amor y compromiso por
esos niños, soñar con ambientes ideales para el aprendizaje dotados con las
tecnologías más actualizadas, pero ante todo plantearse el reto de ofrecer esas oportunidades a
todos, sin dejar ninguno fuera, que cada uno tenga la posibilidad cierta de desplegar sus
talentos, de acceder a la cultura, de responsabilizarse por sus logros y de hacer aportes a
la sociedad. La tarea está lejos de ser sencilla, entre otras cosas exige estar al día en los
avances de la Pedagogía y en los de cada una de las disciplinas cuyos contenidos sean
necesarios para el nivel, grado o especialidad en consideración.
Estos Lineamientos para el Diseño
Curricular son apenas un aporte cuya finalidad es generar una amplia discusión sobre
la educación que vislumbramos y aspiramos para Venezuela. Su intención es unir a
la mayor cantidad de personas a favor de mejorar la calidad de nuestra
educación para ubicar la escuela a la vanguardia de las instituciones sociales en su empeño
por formar mejores ciudadanos, mejores científicos, mejores artistas, mejores
deportistas, mejores técnicos, mejores profesionales, mejores investigadores.
Por tanto, el diseño curricular y
sus fundamentos, establece el proceso de
formación de los y las estudiantes en el que los conocimientos, habilidades,
destrezas, actitudes y virtudes se alcanzan mediante la actividad y la
comunicación, con la finalidad de desarrollar el potencial creativo de cada ser
humano y el pleno ejercicio de su personalidad, en una sociedad auténticamente
democrática, basada en la valoración ética del trabajo y en la participación
activa, consciente y solidaria en los procesos de transformación social,
consustanciados con los valores de la identidad nacional y con una visión
latinoamericana y universal.
Todo requiere de planificación, es
decir, pensar antes de actuar, definir
intenciones para guiar esa acción, organizar los componentes y fases de la
tarea y seleccionar los medios para realizarla. La planificación puede
entenderse como el resultado de una articulación entre el conocimiento y la
acción, es un proceso continuo que sirve para conducir acciones, pero revisando
y adecuando las actividades a tiempo real.
En
tal sentido, para esto se debe tomar en cuenta los diferentes enfoques que se consideran relevantes para trabajar la
realidad educativa del país: el psicologista, academicista o intelectualista,
el tecnológico, el socio- reconstruccionista, el dialéctico y el
constructivista, así como los
modelos curriculares: lineal, de sistema e integrador, siendo estos los que
se adopta en el proceso educativo para caracterizar y organizar internamente
los elementos del currículo. Es importante señalar que casi nunca estos enfoques y modelos se
trabajan solos, por lo que se da una posición ecléctica. El optar por un
enfoque y modelo curricular es una decisión que se toma a nivel nacional, por
lo que es de gran importancia que el docente lo maneje a manera teórica y práctica.
Para finalizar considero que
el diseño curricular junto a sus enfoques y modelos busca una integración de
todas las áreas, también brinda oportunidad a aquellas personas que durante
mucho tiempo se encontraron alejadas de los estudios, incluyéndolas en las
misiones que le corresponden a su edad.